Desde la liberalización del comercio entre la UE y Perú, los agricultores peruanos sufren las desastrosas consecuencias de la competencia desleal. La exportación masiva de patatas fritas congeladas de Bélgica y los Países Bajos a Perú impide a los productores locales vender sus productos a un precio justo. Este acuerdo pone en peligro la pequeña agricultura peruana y favorece a la agroindustria europea, en detrimento de los agricultores y del medio ambiente.
Con los campesinos

Vemos que este acuerdo de libre comercio, firmado por la Unión Europea, favorece una vez más al agronegocio en detrimento de una agricultura a pequeña escala y más sostenible. Debemos preguntarnos qué modelo queremos apoyar. ¿Realmente tiene sentido enviar patatas de cosecha propia en bolsas de plástico, congeladas, al otro lado del mundo, a un país donde ya se cultivan patatas?
Eloïse De Keyser, responsable de promoción de Humundi (ex SOS Faim)
Bélgica es el único país de la UE que no ha ratificado este acuerdo, y hoy pedimos a la Región de Bruselas-Capital y a la Federación Valonia-Bruselas que se opongan a él, para proteger a los agricultores peruanos de la pobreza y de la agroindustria contaminante.
Somos más de 2,2 millones de pequeños agricultores y hemos visto cómo estos acuerdos de libre comercio han devastado la seguridad alimentaria en nuestro país. Pero lo que es más importante, han devastado toda la economía de los pequeños agricultores familiares.
Climaco Cardenas, Presidente de la plataforma de agricultores CONVEAGRO (Perú)